Cuando les ves en acción, ves a un ejercito realmente profesional, bién entrenado y curtido.
Cuando hablas con ellos, te das cuenta de que son gente encantadora, que se desviven para los demás.
Si hay una cosa que me quedó clara, es que siempre puedes contar con ellos y que hacen lo que hacen por amor y pasión sin pedir ni esperar nada a cambio.